sábado, 7 de febrero de 2009

46

Son cerca de las ocho de la noche y el bar “Hasta las manitas” está atascado de gente. Como siempre, Israel esperó a que se nos acabara el dinero para empezar a discutirse con las chelas. Yo solo ya me chingué como un cartón y estoy algo pedo. Mi organismo indica que es hora de orinar otra vez y me dispongo a hacerle caso.

Me levanto de mi silla y me dirijo hacia el baño. Me cuesta mucho trabajo pasar entre la multitud, mis piernas reaccionan cual mierda, y ya hasta veo borroso. Descubro que hay una fila enorme para acceder al baño, me formo y descubro que, justo enfrente de mí, está sentada nada más y nada menos que Gabriela, la chica que me gusta.

No mamar, qué guapa se ve. Generalmente suele hacerse una cola de caballo, pero hoy decidió soltarse el cabello. Viene con sus amigas, pero es obvio que no se está divirtiendo. Mientras sus amigas hablan gritándose entre sí y carcajeándose, ella mira hacia otro lado, como aburrida.

Después de bostezar fuertemente sus ojos se cruzan conmigo, tarda un segundo en reconocerme y acto seguido me saluda con su mano. Yo sólo sonrío como menso. Qué linda ella, saludándome cuando apenas me conoce. Ahora me hace una seña con los dedos de que vaya para allá. Pobre, debe estar demasiado aburrida para considerarme como su alternativa de diversión.

Vuelvo a sonreírle (seguro parezco un tarado) y le digo que espera a que salga del baño, pero ella no me escucha. Mi mente se dispersa un poco y, cuando me doy cuenta, ya estoy en su mesa. Sus amigas están tan alborotadas que ni siquiera notan mi presencia. Gabriela me pregunta cómo estoy y mi respuesta es lamentable: “bien, aquí bien pedo”. No termino de decirlo cuando pienso que ya la cagué. Gabriela suelta una carcajada y me dice “creo que todos aquí”. No piensa que soy un asno, eso me reconforta un poco.

Pláticas de la escuela, algún chiste y después de un rato se agota la conversación. La verdad es que no tenemos más de un mes de conocernos, y además, un bar atascado de gente no es el mejor lugar para conversar. Me quedo como zombi no se cuántos segundos.

Gabriela se toca los labios pensativa, mira hacia el suelo, voltea hacia mí y hace una pregunta inesperada:

- Oye… ¿Quieres… bailar?

Verga. No puede salir nada bueno de esto. Si me paro a bailar con ella, seguro haré el ridículo de mi vida. Pero si no lo hago, no tengo idea de qué va a pasar. Antes de darle una respuesta, volteo para todos lados, veo ligeramente hacia sus piernas y descubro que ¡trae falda! Uff, qué piernotas se carga, nunca lo había notado. Creo que estoy muy excitado… ¿o es que tengo muchas ganas de orinar?

Mi mente se dispersa un poco y. cuando me doy cuenta, ya estoy bailando con ella una canción de reggaetón. Gabriela está muy sonriente ¿o es que se está burlando de mí? Me resulta muy extraña la escena, es como si viera mi propio cuerpo desde fuera. Bailo terriblemente, pero a Gabriela le parece muy divertido. Piensa que lo hago apropósito, supongo. Termina la canción, ella aplaude y me dice “jajaja, eres la onda”.

Comienza una salsa, ella se emociona y me extiende su mano para seguir bailando. Estoy a punto de aceptar, cuando un chorrito traicionero me indica que debo correr a mear. Sin pensarlo dos veces, corro hacia el baño empujando a los que están formados, entro y comienzo a orinar sin importarme que a mi lado estén otros dos sujetos orinando. El chorro parece no tener fin. ¿Cuánto tiempo pasa? ¿5 minutos?

Salgo del baño y encuentro a Gabriela bailando con mi amigo Mario. ¿De donde salió el infeliz? ¿Y por qué es todo un salsero? Pinche culero, se movió rápido. Los veo bailar tres canciones, me aburro y decido volver a mi mesa. Israel ya pidió otro cartón de chelas. Al puro pedo.

30 comentarios:

DÆMOИ dijo...

Crónicas de un bar

Ya llegará la indicada Sandía, ya llegará.

( I_I ) dijo...

¿a la indicada le gustará bailar?

Janus dijo...

Yo creí por un momento que esta noche era TU noche...

Astartea dijo...

deberías considerar beber menos, quizás la próxima vez tengas la misma suerte y así podrás aprovecharte del momento sin hacer el rídiculo

tazy dijo...

chale, primero pensé que eras beto, pero, ahora creo que eres el ganso

sirako dijo...

la historia de mi vida.

sirako dijo...

cuántas veces habré posteado eso de "la historia de mi vida" acá en tu blog?

Libradita dijo...

oye tu post me transportó a una época más feliz donde me embriagaba con frencuencia. que bonito

Rodrigo dijo...

Ya te dije varias veces que NO me llamo Gabriela... y sí, estabas repedo.

Lexico dijo...

Jajaja que mal pedo... pues suerte para la proxima... yo tambien crei que era tu noche...

Lexico dijo...

Jajaja que mal pedo... pues suerte para la proxima... yo tambien crei que era tu noche...

Lexico dijo...

Jajaja que mal pedo... pues suerte para la proxima... yo tambien crei que era tu noche...

Eduardo Meyer dijo...

no importa si no sabe bailar, wey! es la indicada...

Espaciolandesa dijo...

Por fin este blog vuelve a sus raíces... a las anécdotas de un chico cabezón con mala suerte con las chicas :P

Anónimo dijo...

no que eras israel?

DÆMOИ dijo...

Ah Sandía, pues será la indicada, lo sabrás cuando sea el momento, no antes, ni después (si no para que?).

Si eras Israel..?

Anónimo dijo...

¿Quién chingaos dijo que yo era Israel?

Chale...

freivaj dijo...

Enoooorme.

La historia fue muy buena, tuvo casi de todo: un protagonista cagado, la chica en minifalda, un conflicto urinario y la traición de ultimo momento.

Falto el perro con ojos malvados.

El Contador Ilustrado dijo...

cronicas de la dura vida,

al menos por un segundo penso que eras "la onda"

Xavysaurio dijo...

hola Israel ! ñ_ñ

«danito» dijo...

dobabes... Y sigo sin aprender a bailar.

Y nah, pinche vieja zorra, no te merece. A la goma. Bien por el otro carton.

Lady Diabla dijo...

Sirako es israel?

Lady Diabla dijo...

Sirako es israel?

osbel dijo...

si, wey... mal pedo cuando las necesidades físicas nos hacen desmadrar un plan... me ha pasado

DÆMOИ dijo...

Entonces.....



Quien es Israel?

Danniel. dijo...

¿Porqué no golpeaste a tu amigo?

Lucho dijo...

Un carton y apenas estas pedo, esa historia la he oido mil veces.

Anónimo dijo...

el lucho es israel!! linchenlo! mmm bueno no... cabeza!! se que eres israel! que tienes un ferrari, una mega mansión, un play station 4, un yate en tu piscina, y una esposa muy fea!

( I_I ) dijo...

Todos somos Israel...

Y tú no sabes leer.

Anónimo dijo...

quien dijo que no se beber¿?